La volatilidad cambiaria, la incertidumbre financiera y el parate en la actividad económica impactaron en las operaciones inmobiliarias en la Ciudad de Buenos Aires que se desplomaron 41,2 por ciento interanual durante septiembre.
Asimismo la contracción más grave se observó en las escrituras con hipotecas bancarias. El segmento impulsado en los últimos dos años por los créditos UVA registró una contracción interanual del 78% debido a la disparada de la inflación.
Las crecientes tensiones experimentadas por los tomadores de préstamos hipotecarios UVA llevaron al gobierno a lanzar dos semanas atrás un conjunto de medidas financieras para intentar amortiguar el impacto de la aceleración en la inflación y el aumento en las tasas de interés sobre esos deudores.
Para quienes tomaron un crédito ajustado por inflación hace un año, la cuota se incrementó alrededor de un 40 por ciento. Por ello, el gobierno estableció un tope de 10 % al desfasaje entre las cuotas de los créditos UVA y los salarios.
Al mal desempeño inmobiliario relevado por el Colegio de Escribanos de la Ciudad, sumado el ajuste en la obra pública y la ralentización en el inicio de nuevos proyectos privados de edificación, impactarán sobre el empleo en la construcción.
Fuente: 30/10/2018 Página 12 – Nota – Economía – Pag. 1