Aunque los conocimientos técnicos son claves en la empleabilidad futura, varios los expertos aseguran, que las soft skills serán habilidades claves, e incluso las describen como la llave para evitar que determinadas posiciones desaparezcan.
Un ejemplo es la programación, cuyo futuro es incierto debido al machine learning, una rama de la inteligencia artificial que permite que las máquinas puedan aprender por sí mismas, atendiendo a los datos recopilados de los procesos que desarrollan.
Los informáticos deberán incorporar habilidades como la creatividad para pensar en nuevas formas de aplicar la tecnología a fin de garantizar su empleabilidad en un contexto en el que deberán coordinar su trabajo con softwares avanzados.
Junto a la creatividad, en un artículo publicado en el diario español ABC, se señalan otras habilidades que serán importantes como “capacidad de liderazgo, de trabajar en equipo, de gestión de personas y planificación de tareas, de adaptarse a cualquier entorno y situación; empatía; formación constante; inteligencia emocional; o el pensamiento crítico”, entre otras.
“Las empresas tienen claro que es importante lo que sepas, pero más importante es lo que seas capaz de aprender en un futuro porque todo cambia rápida y constantemente. Muchos de los empleos del mañana ni siquiera existen”, aseguró Valentín Bote, director de Randstad Reseach a dicho medio.