América Latina es una de las regiones donde más horas se trabajan al año en el mundo, según información recopilada por la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (Ocde).
Además, la región tiene una de las tasas más altas de informalidad. De acuerdo a la Organización Internacional del Trabajo (OIT), hay 140 millones de personas trabajando en condiciones de informalidad; es decir, 50% de los trabajadores aproximadamente.
Colombia, Argentina, Bolivia, Perú, Uruguay, Cuba, Bolivia, México y Paraguay encabezan la lista de los países de la región que más horas trabajan, con 2.304 horas al año y 48 en promedio a la semana.
A estos les siguen Ecuador y Chile, donde se laboran 45 horas a la semana, o sea 2.160 horas al año.
Continúan la lista Brasil y El Salvador, con 44 horas semanales; es decir, 2.112 horas anuales.
Debemos recordar que laborar más horas no es sinónimo de productividad, pues por ejemplo, según la Ocde, en Irlanda trabajan 1.772 horas (37 horas a la semana) y cada hora trabajada aporta cerca de US$110 al PIB. En comparación México con una de las jornadas más extensas cada hora contribuye al PIB solo US$ 22,2.
Por ello, en Chile el presidente, Gabriel Boric, impulsa en el Congreso un proyecto de ley que reduce la jornada laboral semanal de 45 a 40 horas.
En Colombia, el Ministerio del Trabajo buscaba hacer una reforma laboral que abarca el horario, los tipos de contratos y el sueldo para mejorar las condiciones de trabajo de los colombianos que se trataría en 2023.
Y en México está en comisión del Senado un proyecto de reforma de la ley de trabajo, que establecería un tope de seis horas diarias a cualquier modalidad horaria de trabajo, es decir sin importar si es diurno, nocturno o mixto.
