La pandemia provocó cambios adversos en la rutina de 70% de las mujeres, quienes creen que este evento tendrá un efecto directo en el progreso de su carrera profesional, según una encuesta global realizada por Deloitte.
Esta situación representa “un posible retroceso en los avances alcanzados en materia de inclusión y equidad de género”, advirtió la consultora.
Cerca de 70% de las consultadas que dijeron haber experimentado cambios adversos en sus rutinas diarias durante la pandemia creen que estos cambios les impidieron o les impedirán progresar, reveló el estudio que abarcó a 400 mujeres en nueve países de diferentes niveles de formación y sectores.
Un 65% afirmó que por la pandemia vio un aumento de responsabilidades en el cuidado del hogar y de su familia. Esto generó un “notable incremento en los niveles de ansiedad” y una “sobrecarga emocional”, advierte Deloitte.
Un 23% de las encuestadas dijo haber enfrentado «el dilema de elegir entre sus actividades personales y su carrera«. Incluso, un 10% consideró dejar de trabajar. En tanto, una de cada tres señaló que tiene “mayor carga laboral que antes”.
En lo relativo al trabajo remoto, casi un tercio (29%) de las mujeres afirman que sienten que siempre necesitan estar disponibles. Están preocupadas de que si no lo hacen el progreso de su carrera laboral podría verse impedido.
La consultora propuso cinco consejos para apoyar el desarrollo del personal femenino.
1. Hacer del trabajo flexible la norma. No solo trabajar desde casa sino “también ajustarse a los horarios y necesidades de cada individuo” y desarrollar una “cultura organizacional» para que quienes adhieran no «se sientan excluidos o con culpa”.
2. Liderar con empatía y confianza. Deben “generar oportunidades de apoyo” a sus equipos y medir los avances «por objetivos relacionados con resultados, más que por tiempos, cercanía o supervisión física».
3. Promover prácticas de aprendizaje con mentores o patrocinadores. Para impulsar el avance profesional de las mujeres, respetando los tiempos y espacios que ellas requieren, para evitar ponerlas a elegir entre sus responsabilidades.
4. Evitar sesgos inconscientes en reconocimientos y ascensos. Esto siempre fue importante, pero ahora aún más. El género no debe ser un determinante al momento de decidir y definir quién es la persona que dará o ha dado los mejores resultados en determinadas tareas.

5. Asegurar una cultura de diversidad, respeto e inclusión. Es “fundamental” que estos valores se conviertan en «aspectos no negociables de la organización» para garantizar la igualdad de oportunidades
Fuente: https://negocios.elpais.com.uy/cinco-consejos-empresas-evitar-pandemia-agrave-inequidad-genero.html