Innovación, Recursos Humanos, Reservorio

Moderadores de comunidades on line. Actividad profesional on demand. Por la Dra. Ana Lamas

Hace tiempo que la literatura brega por destacar su característica ficcional, su color, musicalidad y diseño estético como valores esenciales. Tal vez, el valor utilitario, sea uno de los motivos por los cuales las fábulas, no están tan presentes como antes en las aulas de primaria. Sus textos cortos, en general con personajes de animales finalizaban con una enseñanza moral, educativa, denominada moraleja. Tal condición desvirtuaba el objetivo de aquellas ideas sobre literatura “literaria” no formativa, aún vigentes; que tienen sus razones pero no se analizan aquí. Viene al caso, recordar las fábulas atribuidas a Esopo, recreadas por La Fontaine y Félix Samaniego. Así, por ejemplo,  La cigarra y la hormiga  que enaltece el valor de trabajo previsor como etapa previa al disfrute o la del Pastorcito mentiroso que desataca el valor de la honestidad dentro de la comunidad.

 El sociólogo Gérald Bronner estudió el efecto manipulador de las fábulas a partir de las creencias y de las acciones denominándolo “efecto Esopo”. Su punto de vista se centraba en las relaciones sociales negativas que llevan a determinadas personas a influir miserablemente sobre otra/s, sin intención de mejorar su propia conducta. Y en dirección contraria al sociólogo y rescatando el sentido atribuido a Esopo, las fábulas funcionarían como mediadoras de valores morales con la intención de promover los aspectos más humanos de cada persona o grupo, de formar y acercar a las partes disidentes en sentido positivo. Con la introducción de las TIC han aparecido los moderadores on line, quienes serían los garantes de una experiencia comunitaria dialógica y contínua, a la manera de las fábulas en otros tiempos. Sin negar la existencia del efecto manipulador de ciertos mediadores, el objetivo de este artículo se focaliza en analizar la actividad del moderador on line en términos positivos y profesionales, con especial énfasis en las aptitudes y actitudes necesarias para asumir esa tarea como un trabajo.

En efecto, algunas estrategias comunes del moderador de comunidades on line son requeridas en los diferentes tipos de comunidades, en tanto facilitador de conversaciones con usuarios que comparten ideas afines estimulando la cultura asociativa. Entre ellas, las denominadas competencias blandas conocidas por su nombre en inglés como softs skills. Son las que se refieren no tanto a los conocimientos de los temas que se manejan en cada comunidad on line sino más bien al cultivo de las capacidades personales y socialesque se deben mostrar en la relación con otros y que requieren de un entrenamiento específico.

En la actualidad, la actividad del moderador tiene poco espacio en ámbitos académicos superiores. Sin embargo, se presenta como un trabajo con futuro que requiere, sobre todo como se señaló más arriba, el desarrollo de competencias blandas como la capacidad para empatizar, liderar, conformar equipos, dialogar, motivar, crear, estimular, respetar, entre otras: intangibles pero imprescindibles.

Y este oficio que no es nuevo y existe antes de las TIC, va creciendo y se perfila como profesional al mismo tiempo que evoluciona la Web con sus productos y  con la necesidad de compatibilizar el mundo físico humano con el mundo virtual de la tecnología. En la Web 2.0 brotan plataformas de discusión o grupos colaborativos que combinan las tareas del moderador humano con la ayuda de un bot[1]. Sin embargo, queda un camino por recorrer porque los algoritmos que informan a las personas, por ejemplo, sobre las conductas violentas en determinadas comunidades no siempre se detectan, a pesar de los recaudos y los bots.

La Web 3.0 y el metaverso[2] están irrumpiendo en comunidades on line, con los juegos inmersivos contando con moderadores humanos junto a los recursos tecnológicos –bots– que no solo ahora pueden evaluar textos, sino que agregan imágenes, audios y videos. Así van apareciendo comunidades de marcas que organizan eventos, de fans que siguen a cantantes. Y por qué no mencionar las incipientes comunidades que se encuentran con un interés común y luego se descentralizan (DAO- organizaciones autónomas descentralizadas-) y administran sus fondos que alcanzan también al mundo de las de NFT y de blockchaim[3].  Esa multitud de comunidades necesita moderadores humanos que logren convocar a personas con gustos semejantes manteniendo activa la comunicación y valiéndose de las herramientas tecnológicas que facilitan el cumplimiento de las normas dialógicas.

Y como en la fábula de Esopo El león y el ratón que enseña al lector el valor de la colaboración y el espíritu de comunidad; las comunidades on line y sus moderadores profesionales hacen gala de tales valores e intentan integrar, ahora, nuevos ayudantes tecnológicos con ese objetivo. Estimo que la literatura – con moraleja- sigue vigente…las interpretaciones son libres.

Ana María Lamas
Lic. en Ciencias de la Educación (UBA) y Dra. en Filosofía Y Educación con reconocimiento “Cum Laude”. Especialista en Ciencias Sociales y Educación a Distancia.
Docente y directiva en el nivel secundario y universitario. Dictó cursos y seminarios sobre su especialidad en Argentina, América y Europa. Publicó artículos en revistas científicas en el país y en el extranjero.
Escribió libros académicos y de divulgación científica referidos a educación, nuevas tecnologías, juego y trabajo. Emprendió la creación y luego la gestión de una radioeducativa escolar, movida por la percepción del poder educador de los medios de comunicación.
Ha recibido el Premio a la Excelencia Educativa otorgado por la Federación de Cámaras de Comercio del Mercosur. Actualmente es profesora en Maestrías en UCES y Directora de la Lic. en Periodismo de Universidad Maimónides

[1] Bot es la parte final de la palabra robot. Hace referencia a un programa informático que efectúa tareas reiterativas de manera automática y con capacidad de interacción para responder a un estímulo en Internet.

[2] Metaverso (es la contracción de las palabras inglesas meta universo) Los metaversos son entornos en donde las personas físicas interactúan e intercambian experiencias virtuales usando avatares. Se iniciaron con los juegos- uno de los más conocidos es Second Life– y ahora se pueden aplicar a educación, a NFT, entre otras.

[3] Los NFT (sigla en inglés de Token no fungible o activo digital encriptado.) funcionan a través de la tecnología blockchain o de cadena de bloques. Es la tecnología usada en el mundo de las criptomonedas.

Previous ArticleNext Article