Varios años han pasado desde que tuve que planear mi primera clase como futura maestra de primaria, era parte de mi formación profesional obligatoria. Recuerdo como si fuera hoy, que intenté escribir la motivación en el plan o guion previo a la clase y no tenía idea de cómo empezar, lo que sí tenía seguro, era “el síndrome de la página en blanco[1]” … Hasta que una sabia y experimentada maestra me enseñó a crear un cuento como motivación, a usarlo en el desarrollo y a aprovecharlo en el cierre de la clase. El tema para preparar era: “Regla ortográfica: palabras terminadas en “bilidad” que se escriben con “b” indicando las que se exceptuaban: civilidad y movilidad. Lo curioso que me enseñó la maestra fue el desarrollo y cierre nada tradicional …. Era abierto, sí abierto… porque el cuento incentivaba a los alumnos a imaginar, participando de la historia y dejaba hilos pendientes para retomarlos en otros paisajes, en otros cuentos, para enseñar en otros días, a propósito de otros asuntos. Tema árido y aburrido si los hay… ¡Enseñar una regla ortográfica! Se asemeja al de los algoritmos de las tablas de multiplicar. Hoy desde algún lugar del espacio sideral, aquella maestra estará recordando lo que escribo. Y pienso que si hubiera existido la Web 2.0, seguramente el storytelling –arte de contar historias, con medios digitales de soporte y con estructura abierta- habría sido su estrategia preferida.
¿De qué se trata el storytelling como estrategia de enseñanza?
El Instituto Tecnológico de Monterrey en el texto que denomina: Tips para crear historias memorables presenta una serie de recomendaciones a docentes que quieran iniciarse en la estrategia de crear historias abiertas, entre las que se destacan:
- El involucramiento docente en la historia y con el auditorio, haciendo contacto visual con cada uno de los alumnos e indicando con la mirada los momentos de tensión, de suspenso, de sana alegría… Para lo cual la voz humana va marcando la intensidad de la dramatización, con su distinta tonalidad, volumen y secuencia de silencios. Esto es expresarse con la palabra, la voz y el cuerpo, con toda la emoción posible como para captar la atención de los estudiantes.
- La producción del contenido multisensorial con descripciones que conducen a la creación de imágenes, utilizando metáforas, esas que estimulen la fantasía, la creación de mundos subjetivos y fomentado la pregunta del alumno, en donde cada uno podría esbozar respuestas que abrirían una nueva historia al día siguiente.
¿Por qué hacer hincapié en las emociones? Porque el motor de cualquier conducta humana, el origen, la motivación a actuar es siempre de orden afectivo y se aplica al aprendizaje como conducta humana. Si se logra interesar al otro se producirá ese engagement, que llamamos compromiso con lo que se hace. Y ¿Por qué apelar al cierre abierto? Porque rescata los aportes de los estudiantes que dejaron historias iniciadas con capacidad de expandirse. Pero ¿cómo recordar todos los hilos pendientes que nos dejaron “picando” los alumnos? Solo necesitamos grabar y escuchar para retomar y remotivar. Hoy gracias a las aplicaciones de audio podemos prescindir de las notas a mano alzada.
Si a la narrativa de aquella enseñanza -regla ortográfica- le agregamos las posibilidades que ofrece el condimento digital, entonces habremos logrado introducir una nueva estrategia que incentive el aprendizaje. Para eso el docente necesita elaborar:
1. Guion literario (Storytelling), con los momentos: motivación, desarrollo y cierre (abiertos).
2. Guion gráfico (Storyboard) como si fuera una historieta. Se podría usar una aplicación digital para secuenciar las imágenes que hagan referencia al guion del storytelling. Existen para concretarlo, programas gratuitos como MovieMake o Microsoft Photo
3. Guion sonoro (storysound) quepermite inserter, elementos sonoros: locución, música, efectos sonoros. Existen programas de acceso libre Audiocity o SoundCloud que pueden servir de soporte..
Y como me enseñó aquella maestra- cuya energía sigue viva en mi memoria y en el espacio infinito-, me gustaría continuar con su legado invitando a los docentes, a recoger aquel final abierto del storytelling analógico y expandirlo, diciendo: “Y pantaloncito corto para que vos me cuentes otro”.

Lic. en Ciencias de la Educación (UBA) y Dra. en Filosofía Y Educación con reconocimiento “Cum Laude”. Especialista en Ciencias Sociales y Educación a Distancia.
Docente y directiva en el nivel secundario y universitario. Dictó cursos y seminarios sobre su especialidad en Argentina, América y Europa. Publicó artículos en revistas científicas en el país y en el extranjero.
Escribió libros académicos y de divulgación científica referidos a educación, nuevas tecnologías, juego y trabajo. Emprendió la creación y luego la gestión de una radioeducativa escolar, movida por la percepción del poder educador de los medios de comunicación.
Ha recibido el Premio a la Excelencia Educativa otorgado por la Federación de Cámaras de Comercio del Mercosur. Actualmente es profesora en Maestrías en UCES y Directora de la Lic. en Periodismo de Universidad Maimónides
[1] Síndrome de la página en blanco, es una expresión popular que caracteriza a la falta de ideasen el momento de escribir sobre algún tema.